Aunque
existan diferencias de forma, el fondo en todas las religiones y culturas es
muy similar, dándole especial sentido a un bautizo como forma de vinculación
con lo divino y con el entorno.
Porque
ya asea que se bautice a una persona de cualquier edad, especialmente a los
bebés a quienes se les prepara un gran pero humilde festejo por “quitarle los
cuernitos”, que va desde una misa solemne, pasando a una gran cena con torta y
todo y regalándoles detalles para invitados bautizo como forma de agradecimiento por su presencia y
vinculación espiritual.
Ocurre
por igual en un bautizo de mascotas (cada vez más frecuentes), el bautizo de
una tienda o de un vehículo, especialmente los marítimos, el cual ha sido un
acto milenario que no sólo significa inicio al botarse a las aguas, sino un
pedido solemne por la protección divina al estar en las aguas.
El sentido de un bautizo
En
el cristianismo es un sacramento solemne; y de otras formas y definiciones
–pero todas con el mismo fin- se encuentra en el budismo, islam, judaísmo o
taoísmo, específicamente cuando un maestro reconoce el crecimiento y evolución
de sus pupilos o una grey se une a una misma idea.
La
intención y significado de un bautizo se entiende pues en cualquier cultura o
religión como un sacramento de iniciación que permite crear nuevos y mejores
vínculo con la fe tanto de la familia como de su entorno mediato al más lejano.
Una
de las responsabilidades más hermosas y revestidas de confianza es la de elegir
al padrino y madrina, las cuales deberán ser personas comprometidas con la fe y
dispuestas a guiar al niño en su vida espiritual, así como ser un ejemplo de
disciplina y empatía, tal cual los familiares consanguíneos.
Un
bautizo de adultos es, además de una acción noble y de convencimiento, que
muchas veces se hace por entendimiento y amor a alguien, es una manifestación
de fe al prepararse con clases especiales para entender mejor este sacramento y
los demás, como por igual la importancia y propósitos de todos.
Un
bautizo es una combinación del orden ceremonial y sublime, vinculado a los
rituales involucrados en conjunto a la participación y ética de cada uno de los
asistentes, sin importar su fe y/o cómo la manifiestan.
Aunque
las iglesias son el lugar indicado para realizar un bautizo, existen ocasiones
(ligadas a las inauguraciones y varios temas adicionales), donde el rito o acto
del bautizo se ejecuta en el lugar donde se laborará o vivirá. Es la mejor
manera de estrenar un recinto y decir con orgullo que es un lugar de fe.
Un
bautizo es para muchos un motivo más de celebrar la vida, las ganancias, los
nuevos comienzos. De allí que algunos realicen grandes fiestas con sus mejores
galas y sus más amplias sonrisas, decididos a festejar el que su esfuerzo y
amor le han llevado al lugar a donde están, para gloria del Altísimo y
tranquilidad de su existencia, además de ser un punto de apoyo para personas
amigas o colaterales, lo que es socioeconómicamente beneficios a la par del
regocijo espiritual que se desborda cuando la fe es demostrada en la bonanza y
la adversidad.
Comentarios
Publicar un comentario